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Desde la comunidad de Drake, un poblado que se encuentra en el sector noreste de la Península de Osa es posible desplazarse hasta la Isla del Caño, un parque nacional de indescriptible atractivo para los amantes de las playas, los bancos de coral y la vida marina, y también la Estación Sirena, principal puerta de entrada al Parque Nacional Corcovado. A Drake se puede llegar por dos rutas: una marítima y otra por tierra.
En ella se puede encontrar la flora y la fauna de tierra y mar, las olas mansas y esa sobrecogedora sensación de aislamiento que tanto disfruta la gente de ciudad.
La diferencia está en que ahora hay hoteles y albergues y servicios de alimentación y transporte. El desarrollo turístico, sutilmente respetuoso de la naturaleza, permite al visitante pescar, nadar y bucear, entre otros deportes marítimos, y desplazarse por senderos con olor a aire puro y sonidos de la naturaleza.
La oportunidad de disfrutar este escenario natural es mayor si se tiene a disposición un vehículo que facilite independencia, garantice seguridad y sea confortable.
